sábado, 25 de julio de 2020

ALFOMBRAS



En mi lectura de algunos textos prima más la acumulación de relatos que su secuencia o trama común. Alguno de estos textos parecen reconocer esa condición cumulativa, como La vida instrucciones de uso de Georges Perec, subtitulada Novelas. (Curiosamente algunas traducciones al español de este libro no recogen el subtítulo, que me parece definitorio). 

Me pasa lo mismo con la Metamorfosis de Ovidio, que leí hace poco en la traducción de Navarro Antolín y Ramírez de Berguer. Y con la Biblia, en especial el Antiguo Testamento. No digo que no distinga hilos narrativos que recorren varias de las historias y que un lector más informado captará mejor, pero leo sobre todo la acumulación de relatos, la diversidad que somete cada pieza al contraste con la anterior y la que le sigue. Y con el conjunto: la pila y poso que se va formando. Me recuerdan el modo en que el comerciante del zoco va mostrando, una sobre otra, las alfombras, todas distintas y semejantes. 

El vendedor tiene una estrategia. Al final las alfombras se confunden, da igual una que otra. Es más fácil alterar el orden de tus preferencias. Y la compra acaba siendo la única forma de detener la acumulación exhaustiva. Al cabo de las páginas, también los vecinos de un piso del edificio de Perec podrían aparecer en otro, el héroe desafiante y la diosa implacable podrían cambiarse por los de la historia previa y ser otro el animal o la planta en que aquel acaba metamorfoseado.