domingo, 15 de julio de 2012

EL SUSURRO DE MAO


Mientras la nueva burguesia china arrasa los Gucci de medio mundo me sumo a las masas populares que en largas filas confluyen en el mausoleo de Mao. Propulsado por una marea humana casi consigo olvidar mis preocupaciones, pero hay algo que aún frunce mi ceño y me impide participar plenamente en el breve pero intenso ejercicio de atención colectiva alrededor del Gran Timonel. La prima de riesgo española ha vuelto a bajar pese al anuncio de nuevos rescates europeos y recortes nacionales. Me detengo al notar que Mao bisbisea. Pego el oído a la urna que contiene la momia y resisto los empujones de quienes me siguen en la fila. Antes de ser expulsado por la policía consigo entenderle.
-Es el capitalismo de Estado- dice imperturbable-